Práctica de lineas

 Una de las dudas más habituales para quienes recién comienzan (y a veces también para los que están hace rato en esto) es cómo hacer buenas líneas.

"Buenas líneas": líneas fluídas, generalmente de un sólo trazo/pasada, sin accidentes de profundidad, pulso, etc. 

Por qué no se logran? principalmente 4 motivos, en orden de importancia: 

1. experiencia del tatuador
2. máquina bien calibrada
3. piel complicada
4. agujas malas

1. Como  no podemos tener experiencia instantánea, lo primero que vamos a hacer es practicar mucho el control del pulso: primero con un lápiz y papel comunes, hacemos trazos de líneas, una franja de verticales, una franja de horizontales, una franja de diagonales...después franjas de círculos, triángulos, líneas onduladas, etc. La idea es aflojar la mano de a poco, para ir trazando con fluidez, y también mejorar nuestra visión de dibujante, al realizar formas más armoniosas. Es lo mejor dedicarse también, bastante tiempo, a dibujar, no tatuar, porque quien domina el dibujo ya tiene una base ideal para comenzar a tatuar. Pero como el dibujo abarca muchísima más explicación, veré de hacer una entrada aparte para tratar este tema.

Luego ya tatuando, con una base de dibujo, es acostumbrar al oido y a la práctica de las manos, y nos vamos a dar cuenta enseguida si todo va bien, o si debemos cambiar algo, lo que nos lleva al 2do punto.

2. Una máquina tradicional, es decir, una de bobinas/electromagnética, necesita calibrarse. Hoy en día es normal que vengan ya calibradas desde los fabricantes, pero en cualquier momento uno puede necesitar saber como ponerla a punto de nuevo, y además, saber distinguir entre máquinas para distintos trabajos. Lo mejor que pueden hacer para aprender lo básico, es leer el libro de los Godoy (que adjunto en este curso), ver videos u otros artistas tatuando en vivo, ver como preparan las máquinas, etc. Son muchos los errores que se pueden cometer, detalles que hay que cuidar y estar atentos para cuando NO estás trazando bien, como poner una banda elástica demasiado apretada, no tener la aguja centrada en el tubo, tener un fleje desgastado/roto, tornillo de contacto demasiado apretado o demasiado flojo, espacio incorrecto entre la barra de bobinas y el cuadro al final, y un laaaargo etcétera. No es para desanimarlos, pero realmente hay que instruirse en lo básico, para poder ir viendo detalle por detalle.

Voy a dejar en esta misma entrada, al final, errores habituales y como solucionarlos.

3. No todas las pieles son iguales, ni siquiera la piel es la misma en distintas zonas del cuerpo. En general, es más fácil de tatuar una piel joven y tersa, que la de alguien que ya pasa los 40/50 años. Salvo quizá, atletas, gente que hace deportes y se cuida. En especial en la tercera edad, la piel se vuelve más fina, con manchas, arrugas...es preciso estirar y no pasarse con la profundidad ni el voltaje, porque es más probable que la tinta se expanda lo que no debe y/o "explote".

Después va a haber zonas del cuerpo más fáciles, como brazos, piernas, espalda...y otras más complicadas, como costillas, panza, pecho... inclusive dentro de una zona fácil, como lo es los brazos, la parte interior suele ser más complicada de tatuar, a la altura del bícep, cerca de la axila.

4. Aunque no lo parezca, a veces las agujas vienen mal o se golpean, normalmente cuando cargamos tinta sin parar la máquina, lo que hace que las puntas se doblen y queden como ganchitos o parecido. Es difícil de ver a simple vista, pero con buena luz y una lupa, se nota. Cuando están asi, hay que cambiarlas, porque van a lastimar, no a tatuar. Lo mismo sucede con agujas que no notas nada, pero no tienen filo. Las agujas pueden durar todo el tatuaje, pero no siempre, hay que cuidar las puntas, y no es mala idea de vez en cuando enjuagar para retirar restos de vaselina.

Y bueno, llegados a este punto, vamos con las consultas que veo normalmente, si consigo imágenes de los desastres después las agregaré:

• Líneas que quedan como puntos: bajo voltaje, máquina mal calibrada (hay que observar bien el recorrido)
• Líneas con distintos grosores: esto puede suceder porque repasamos mucho, o porque clavamos a distintas profundidades. 
• Líneas que desaparecen cuando se curan, enteras o por partes: puede pasar ya sea por haber tatuado superficialmente* (ver nota abajo), por mal cuidado posterior del tatuaje, y también por algunas zonas que son de rápida generación, como manos/dedos/pies.
• Líneas que aparecen brillantes después de haberse curado, con o sin bordes secos y blancos: probablemente el voltaje haya sido mucho, por lo cual la piel se lastimó.
• Líneas "reventadas" o "explotadas": se ven como líneas que de repente hicieron un charquito, en vez de ser lineas...pasa por mucho voltaje o profundidad.
• Imposible hacer una línea, las agujas se "enganchan" a la piel: ver punto 4, arriba.

Obviamente estamos suponiendo que trabajan con insumos de buena calidad, y los malos resultados no serán por este motivo.

*nota: La piel tiene 3 capas: epidermis, dermis y hipodermis. Se supone que en la profundidad que penetran las agujas, de no más de 2 mm, los pigmentos se alojan en la capa media, o sea la dermis, y queda flotante entre las otras dos capas. Si queda muy superficial, en la epidermis, se va a terminar borrando. Si queda muy abajo, en la hipodermis, normalmente forma manchones, líneas explotadas y/o hematomas.

Si notaron algún otro problema, pueden comentar en esta misma entrada!